Crónica sábado 12 de setiembre

Hoy ha sido una mañana muy tranquila en la radio…

Las puertas del portón que va hacia la radio estuvieron cerradas ya que hoy fue el cumpleaños del “Pocho”, funcionario designado los sábados para realizar la vigilancia durante lo que dura la actividad de la radio, y al no estar el Pocho y al haber dos guardias de seguridad para buena parte del Hospital, la entrada sería por la puerta central del Hospital, sin aviso de que al pasar se revisarían bolsos y bolsillos. Lo curioso o no tanto, ya que así suelen funcionar este tipo de instituciones (totales y de encierro), fue que solo revisaron a los estigmatizados o a los sospechosos portadores de locura. A nadie del equipo técnico le pidieron nada, todo lo contrario, nos dejaron pasar tranquilamente y de las revisaciones nos enteramos más tarde cuando alguno de los participantes se empezó a quejar de la violencia que esto le había generado… Por suerte pudimos tomar la voz y abrir la programación comentando estos hechos y pensando en la arbitrariedad con la que se manejan este tipo de funcionarios e instituciones, al decir de Goffman, totales. A pesar de ello arrancamos bien, tranquilos, con una pereza que no coincidía con la fuerza del sol que nos saludaba.

Mientras nos comenzamos a organizar para encarar la mañana, sacamos unas cajas que aún estaban apiladas en la cabina (en la nueva cabina) y nos reencontramos con todas nuestras fotos, afiches y carteleras que, durante la mudanza del viejo centro Diurno al nuevo local de la radio, habíamos guardado. En segundos desenterramos muchísimos años de historia y nos reencontramos con mucho del camino andado por la radio. De allí que nos pusiéramos manos a la obra con el objetivo de volver a poner esas cosas en las actuales paredes que nos cobijan. Así fue que mientras unos recortaban y seleccionaban otros hicieron mandados: espuma plast, cinta adhesiva, papel afiche y papel glacé, chinches y alfileres… Durante la salida al aire todos fuimos metiendo mano rotativamente y pudimos terminar y colgar las nuevas carteleras y los viejos afiches. Comenzamos así a retomar una estética de “radio combativa” como alguna vez la definiera nuestro amigo Yamandú Cruz (Espacio Quiroga-Identidad Antídoto).

Nuestra Programación transcurrió entre poemas, ganas de cantar, un funcionario del Hospital que tenía avisos e invitaciones para realizar, horóscopos, una mesa de noticias y un debate en torno a la nueva ley de adopciones y la posibilidad de que los homosexuales estuvieran incluidos en la misma. Interesante momento de la mañana donde pudimos pensar en que en estos temas nos seguimos moviendo con prejuicios. Uno de ellos es la pregunta por quién será la madre y quién el padre, interrogante que desde su enunciado parte de no poder pensar estas nuevas configuraciones familiares por fuera de la clásica concepción de familia. ¿No es más difícil explicarle a un niño por qué sus padres decidieron darlo en adopción que las razones por las que vive con una pareja del mismo sexo?… Una de las preguntas que nos hicimos pensando sobre todo en los niños y no tanto en qué piensan los adultos. Con respecto al tema, Mario compartió una entrevista que se publicó en La Diaria a la periodista y cineasta española Ana Boluda… apellido común en España pero en Montevideo no, al contrario, boludo o boluda puede muchas veces ser utilizado de forma despectiva hacia la persona que es quedada, etc… Esto nos hizo recordar varios nombres y apellidos que combinados son una bomba y que desde ya solicitamos que piensen bien qué nombre le van a poner a su hij@ ya que por ejemplo, a la hermana de Carlos Soria, los padres le pusieron Susana y todos se reían cuando al pasar la lista se escuchaba: Susana Oria, contaba Richard mientras en la fonoplatea todos nos moríamos por agarrar el micrófono para decir algo.

Todo esto y mucho más sucedió en Vilardevoz, la radio de los Locos de Millán, en la 95.1. Hasta el sábado que viene!!!

1 Comments

  1. Jaja, es la primera vez que entro a la página y leo la crónica del día. Me gustó mucho el tono que se transmite en las líneas. Sentí que más que una crónica de «los hechos», es una crónica de «las sensaciones», y creo que ese es el gustito que hace sacar las cosas adelante. Saludos!

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